Mapa de La Dimensión Mágica de Bosques

Mapa de la Dimensión Mágica de Bosques

  Mapa de la Dimensión Mágica de Bosques   La Dimensión mágica de Bosques, lugar donde habitan los seres tres esencias y algunos yok...

domingo, 30 de octubre de 2022

La fantasmal Semforah

 

La fantasmal Semforah

 

Ya habíamos hablado antes de Pankrathos el león alien regente de los que se convierten en animales, humanos e intermedios humanoides, llamados los tres esencias.

Estos seres vivían en distintos bosques que se conectaban entre sí en una enorme red dimensional llamada La dimensión mágica de bosques.

Entre esas zonas de bosques alejados y unidos al mismo tiempo, vagaba un ser bastante curioso.

Ese ser  tenia forma de mujer, una mujer de metro ochenta de alto, vestida con amplias ropas negras y harapientas, ella tenía el pelo hasta la cintura de color negro azabache, su piel era pálida y blanca como hoja de papel, sus ojos eran totalmente negros, tanto que no se podía distinguir ni esclerótica de iris o pupila. La forma de su cuerpo era curvilínea y algo sensual. Ella se llama Semforah, la fantasmal.

Los seres de los bosques que son los tres esencias, no le temían, pero ella tenía algo especial, estaba perturbada de su mente, escuchaba voces, tenía arranques de risas histéricas, hablaba sola por los rincones y no controlaba el volumen de su voz, a veces susurraba y otras tantas hablaba a los gritos siendo muy estridentes, se la veía a veces cantar canciones sacadas de la nada.

Un día, Semforah, les pidió ayuda a los hombres lobo y a los hombres osos, ellos acudieron al llamado y le preguntaron que necesitaba.

-¿Qué necesito?  Uno de mis gatos que me acompañan se ha perdido, es uno negro de bigotes blancos, Quiero de vuelta a mi gatito, Semforah está triste porque me falta uno de mis siete gatos negros.

En ese momento, en el Gran Bosque, no solo hombres lobo comandados por Fedrez el lobo gris y los hombres oso comandados por el líder de los osos Magnos Arctus Armel  salieron a buscarlo. También salieron a buscarlo Kyan Tati la zorra y la mapache Neyk Itet, las espías e informantes de todos los bosques.

Esto llegó a oídos del león Pankrathos, que se ofreció a cuidar y darle ánimos a Semforah.

-Quédate tranquila, todos ellos encontraran a tu gato, no pudo haber ido muy lejos, aparte, todos estos seres son buenos encontrando cosas. –dijo el león con su grave y tranquila voz

-¿Y si le pasa algo? No puedo estar sin mi gato, si pierdo un gato me vuelvo más loca de lo que ya estoy… ¡voces guarden silencio! Encontrarán a mi gato, estoy segura. –dijo una preocupada Semforah.

Pasaron unas horas que parecían eternas, pero de pronto, el león y Semforah vieron a Kyan Tati llegar caminando con un gato negro entre sus brazos.

-¡Mi gato! ¡Mi gato! ¿Qué le sucedió? ¿Por qué está tan quieto?

-Disculpa Semforah, lo encontré sin vida en el agua de la cascada, perdón que te hemos fallado.

Entonces la entidad con forma de mujer empezó a llorar desconsoladamente.

-Kyan no todo está perdido, sostén en tus manos al michifus, tengo una idea –dijo Pankrathos

-¿qué idea? –dijo la zorra

-ahora verás –dijo un tranquilo Pankrathos

Kyan tati, sostuvo en sus manos al gatito negro y el alien león extendió las manos imponiéndoselas al cuerpo sin vida del gato, de esas manos, empezó a brotar una luz destellante y poderosa de color dorado. En menos de tres minutos, el cuerpo sin vida, la recobró y se empezaron a sentir unos maullidos de gato.

Semforah, escuchó el maullido de su gato y dejó de llorar, sus blancas manos tomaron al gato y lo acariciaron. Ahora la mujer se sonreía mostrando sus blancos dientes.

-¡Voces! resucitaron a mi gato, Semforah no puede estar más feliz, ¿cómo puedo pagarles semejante acción? ¡Esto no tiene precio!

-querida mujer, no podía dejarte que estuvieras más desdichada de lo que ya eres, comprendo lo que es estar mal, yo mismo perdí un montón de compañeros, como iba a dejarte desdichada, no mereces eso, ya tu vida es muy tortuosa. –dijo un conmovido Pankrathos

-muchas gracias Pankrathos, Semforah recordara esto con mucho cariño, ¿han visto voces? Me han ayudado, ahora debo ayudarlos a ellos.

-muchachos, hay que festejar, recolecten comida ¿Semforah, que deseas comer?

-Semforah ama las frutas, quiero muchas de ellas. –dijo una sonriente y contenta mujer.

Luego de todo esto, con festejo por medio, la mujer fantasmal, llamada Semforah, se comprometió a ayudarlos en todo lo que necesitaran, sobretodo en misiones que necesitaran un ser tan especial como ella, que a pesar de padecer graves problemas mentales y tener siete gatos a su cuidado, aún era un ser bello y útil.

 

Fin

sábado, 8 de octubre de 2022

Pankrathos el regente

 

Pankrathos el regente.

 

Hacía un poco tiempo que Aren y Yulen, el hombre tigre y el hombre puma, habían llegado al Gran Bosque, ellos fueron indagados para saber sobre un ser en especial, uno cuya existencia era fundamental para todos los tres esencias, el regente supremo de todos los seres humanoides que se convertían en tres tipos de seres.

En estos momentos, ese ser era de paradero desconocido, aunque las dos espías de turno, Kyan Tati la zorra kitsune y Neyk Itet la mapache tanuki, dieron con las pistas indicadas para encontrarlo.

Ellas llegaron y hablaron con Fédrez patas blancas, el lobo gris que es un guardián y chamán aparte de ser un alfa del consejo de La tribu de Lobos, apenas este se enteró, hizo llamar a Aren y a Yulen.

-Aren, Yulen, vendrán conmigo a buscar al regente supremo –dijo Fedrez

-¿Qué tan importantes somos para que te acompañemos? –dijeron ambos

-¿No son felinos de zona montañosa?

-Sí, lo somos.

-Entonces está todo dicho, mañana a la mañana, saldremos a las montañas de La zona central, el Bosque 13-2-17.

-¿13 - 2- 17? Pero esa zona es de avistaje de naves extraterrestres –dijo Aren sorprendido.

-Ya me oyeron, mañana salimos hacia allá y no hay peros que valgan. –concluyó Fedrez cortante.

Ya siendo la mañana siguiente, Aren y Yulen, junto con Fedrez, se dirigieron al portal central, el que estaba al lado del recinto de ancianos y a un costado de la zona de reunión del consejo de los alfas, dicho sea de paso, ese portal casi nunca se usaba, solo en casos especiales como este mismo.

El lobo gris activó el portal y lo cruzaron junto con los hombres felinos. Al otro lado, los esperaba la zona 13 -2 -17, un área de la dimensión de bosques en la que fluctuaban la realidad, la dimensión de bosques y una alta energía disruptiva muy pesada, esta zona era conocida por actividad paranormal y una fuerte actividad de avistaje de naves extraterrestres e interdimensionales.

Tranquilamente se podía decir que aquí empezaba todo mito de seres mágicos y todo ser que no podía ser casi descripto.

Luego de cruzar el portal y llegar a destino, el lobo gris les dijo a los felinos que tomaran su forma de hombre puma y hombre tigre, dado que no podían levantar sospecha.

Caminaron un buen rato, hasta que llegaron a un edificio algo raro, tenía forma de pirámide, como las que dicen que hay en todo el mundo y están conectadas entre ellas.

En la entrada de ese lugar había un león recostado.

-¡ey! ¡León! Sí, tú, ¿conoces al regente supremo? - dijo Yulen sin mucho problema.

-¿quién pregunta?

-los seres tres esencias de la dimensión de bosques

-oh, por fin me vienen a buscar. Pasen dentro del edificio conmigo, seguro ya me conocen

-¿quién eres?

-Pankrathos, el león Urmah, regente supremo.

Fedrez y los demás se quedaron helados, ellos pensaban que los Urmah solo eran una leyenda del mundo humano, a pesar de eso, ellos siguieron a Pankrathos hacia dentro de la pirámide.

Luego de mucho caminar, llegaron a una habitación grande y acogedora.

-Queremos ver tu forma original si no es molestia, estamos acostumbrados a vernos de forma humanoide. –dijo Fedrez luego de sentarse en el suelo.

-De acuerdo, estamos entre pares.- dijo Pankrathos

Aren y Yulen se sentaron en el suelo igual que el lobo gris, porque lo que seguía a continuación hacia caer de trasero a cualquier ser.

Pankrathos, el león, se convirtió en un ser humanoide de dos metros cincuenta de alto, vestido de azul, con una cicatriz en su frente que era de forma de cruz parecida a una equis, una enorme melena blanca y con los pies descalzos enormes, también llevaba un cinto de tela que le cruzaba la cintura  y dos más que le cruzaban en diagonal de los hombros  a la cintura, en ambos tres casos, estaban atados con nudos y  sobresalía tela, sus ojos eran blancos con una pupila negra en el medio, toda su presencia, trasmitía una enorme paz, y su voz era grave pero agradable y muy relajante.

Ya todos sentados en el suelo, Pankrathos tomó la palabra con su grave voz

-sé que vienen a preguntarme, puedo leer sus pensamientos y ellos dicen ¿de dónde venimos los tres esencias?  ¿Por qué debemos escondernos? ¿Por qué somos perseguidos y rechazados? No se preocupen, todo tiene su debida respuesta. –dijo el León humanoide cerrando los ojos y realizando un gruñido gutural.

-Todos nosotros venimos de las estrellas, cuando yo llegué a este mundo hace miles de años, vinieron otras razas conmigo, encontramos seres humanos, al principio eran amistosos y cordiales pero como todo humano, algunos odiaban que fuéramos distintos a ellos, que fuéramos más fuertes, a todos los que pudimos, les enseñamos casi todo lo que pudimos a los buenos de corazón, pero llegado el momento, tuvimos que refugiarnos en zonas de difícil acceso, usar nuestra capacidad de ser invisibles, poder leer mentes y de teletranportarnos, yo fui uno de los que necesitó solo ser un animal y tener mi forma humanoide, nunca ví necesario transformarme en humano, preferí volverme invisible. Y todos los que se volvieron tres esencias por alguna magia hechizo o maldición, es porque tenían esa capacidad latente y algo los obligó a transformarse, todo animal  y ser humano, tiene su capacidad de volverse humanoide, porque son descendientes genéticos de un ser extraterrestre.

-¿entonces todos estos milenios preferiste no ser visto que morir? –preguntó el lobo gris

-fue una difícil decisión pero si quería mantener esto vivo, debía sacrificar algo.

-¿tu comes comida? –indagó un curioso Aren.

- no me es necesario, estoy en constante meditación, he transcendido luego de milenios, pero si quieren comida, puedo darles un poco de ella.

Luego de tanta charla, los tres comieron una comida muy suculenta que Pankrathos les preparó a los tres visitantes, dado que al ser el regente, muchas veces llegaban seres muy hambrientos a buscarlo y por lo tanto se había vuelto un excelente cocinero.

Luego de estar saciados de comer, Fedrez Aren y Yulen, descansaron una noche entera y al otro día, lo vieron al león despierto leyendo unos pergaminos.

-¿No duermes? –preguntó Fédrez

-No me es necesario, aparte, estaba velando por su descanso ¿fue reparador?

-fue excelente, nunca dormimos tan bien.

Ya entrado el mediodía, los tres esencias partieron para el Gran bosque, ya sabían dónde encontrar al regente supremo, nunca pensaron que todo iba a ser tan bonito y tan cordial.

Por fin se resolvió el gran misterio que todos querían descubrir, en la zona 13 -2- 17, se encontraba el regente de los tres esencias, que ellos eran de naturaleza extraterrestre y que todo era una capacidad latente, solo había que saberla despertar.

Fin